Jana cree que las cosas con Manuel van mejor que nunca, pero el heredero sabe que su madre no va a consentir que tenga una relación con ella y busca apoyo en su amiga Blanca.

Santos se presenta al resto de los miembros del servicio, mostrándose como una persona altiva y narcisista.

Lorenzo descubre que Pelayo le ha escuchado hablar con el supuesto comprador.

Virtudes parece más integrada que nunca en el palacio, pero eso no evita que Simona siga muy preocupada por su hija.

Cruz pregunta directamente a Blanca si tiene algo con su hijo y la joven se molesta y se lo cuenta a Manuel.

La relación de Lope y Vera llega a su punto más bajo.

Manuel aprovecha la llegada de Blanca Palomar para compartir sus confusos sentimientos.

A Pelayo se le descubren nuevas mentiras.