Tras las mutuas acusaciones, Alonso y Fernando cuentan a sus respectivas mujeres sus contradictorias versiones de cómo fue la fatídica muerte de Petro, su hermano mayor y el heredero natural de La Promesa.
La llegada del hijo del Duque de Carvajal y Cifuentes a La Promesa es inminente y los marqueses azuzan al servicio para que todo esté impecable cuando aparezca.